Hoy vengo a hacer uso de mi blog por varios motivos.
No, no son varios, son sólo tres.
Uno es para dar mis señales de vida y disculparme con el
Dr. Daniel, por no escribirle. La verdad es que tiempo para escribir cosas que no sean parte de mi quehacer estudiantil, no me lo he dado. Menos aún para entrar a mi blog y al de los demás. Se agradece la preocupación.
El motivo dos es para... se me olvidó. Pero tenía un motivo número dos hasta hace unos segundos atrás. Filo.
El motivo tres es para escribir. Y fíjense en el título de este artículo:
El post llorón. Sí, quizás salga llorón o no tanto, pero bue. Ahí voy.
Resulta que está sucediendo un fenómeno realmente extraño, relacionado conmigo y la U (y lo que conlleva a la U). Un fenómeno al cual no estoy muy acostumbrada.
Para que sepan de lo que estoy hablando lo ejemplifico de la siguiente manera. Una compañera de la universidad me dice "Es raro andar contigo. Pa donde vai, vas llena de gente. Todos te siguen". La verdad es que siempre me ha gustado llamar la atención, lo reconozco, pero lo hago siempre dentro de mi círculo de amigos, nunca
en público. Y ahí estoy yo, en medio de las masas, conversando con cuanta gente se me cruza, cachando que hay más gente que me ubica que la que yo ubico, notando que ni entre los cursos mayores soy un ente pasivo. Es como si de repente me hubiese jalado una línea y me aflore por todos lados "lo social" de mi personalidad.
Aquí estoy, extrañando mi
low perfil, aquel que he venido perdiendo desde el año pasado. Mi low perfil y todo lo que tenía éste.
¿Y qué había en mi low perfil? o ¿qué tiene que ver con lo me pasa ahora por la cabeza?. Mucho o nada. No lo sé. Pero me dio con extrañar a las personas que no veo desde hace un tiempo. Es como si me parara desde lo alto de una montaña para ver cómo es que se desenvuelven las vidas de mi gente, sin que yo figure en ellas. Pero yo, desde arriba, sin intervenir.
Alto. Que nunca digo nombres aquí. Pero como buena alumna que soy, estoy aprendiendo a que uno debe decir las cosas por su nombre, para que nada se tergiverse.
Así que hoy, en nombre de todo lo que he escrito aquí, quiero dejar mis saludos a algunas personas, que no sé si leen mi blog, si lo habrán leído o si algún día lo leerán. Aprovecho la tecnología para mandar mi mensaje a estas personas de las que me he acordado y que no he visto. Ojalá me ayude de algo y sentirlos más cerca.
Saludos a KK. Que sé que me lee de vez en cuando, porque me ha dejado mensaje. Pero eso no importa. Que no le de tanta vuelta a las cosas, que no piense tanto. Que hay que pensar, pero en las cosas importantes y esas, ni siquiera tanto. Si no, se vuelven un tormento. Y cuando uno aborda un problema desde una perspectiva y no resulta; es bueno que cuando salga otro problema, lo miremos desde otro lado. Aplicar otra fórmula. Si no ¿de qué te han servido todos los Cálculos que hay hecho en la U?. Las matemáticas, sirven, jaja. Las matemáticas no mienten.
Saludos a Vilshes, mi aporreado amigo. Que de verdad lo estimo y deseo que esté tranquilo, en paz consigo mismo y los demás.
Saludos a la Chico-k. Espero ir ahora a Magallanes con ella, con otro cartón respaldándome, no como forestín, pero me sirve igual. Chico-k, pero grande. Bacancia la chicoca. Con tiempo para todo y para todos, incluso para sus niños (que ahora ya no son tan-niños).
Saludos a Pablo, el candoroso. Que tus amigos más cercanos sepan sostenerte y cuidarte de la mala onda que a veces llega. Mientras nos vimos, creo que estuve ahí. Al menos así lo siento. Ahora... ahora, estoy acá.
Saludos a Chuby... Demasiadas cosas que decir aquí. Pero que jamás olvide que dentro de todos los roles que socialmente debemos cumplir, está nuestro rol como individuos, con nuestras propias necesidades, ajenas a las del resto. Que todo parte por estar bien desde adentro, que no es malo estar primero nosotros y después el resto. Si no, después llega la boleta, los cobros... con intereses. Pucha... hay gente que te reclama para ti (primero chuby, segundo chuby y tercero chuby) y no pescas. Vuelve... queremos pie de limón!.
Y ya!!. Es que fueron dos años rebuenos.
...Pero ya estoy en otro lado.
Y que extraño tanta huevada que hice con ustedes. Tanta, tanta.
Mi cámara sacando fotos.
Y que no olvido los días en que nos veníamos pa mi casa a jugosear, comer, ver películas fomes.
Y echo de menos pagar apuestas y hacerlo con
ticket restorant.
Pero estoy acá.
Llena de gente.
Se vienen cinco años nuevos. Puros, para hacer lo que quiera de ellos.
El resto de mi gente, la que no nombré aquí, es harina de otro costal, esos se bancan mis cosas face to face. Mala cuea pa ellos. Curiosamente son los monos del antro pasado los aquí nombrados. Y es que ese lugar me produce algo. "¿Que no sientes a JGM cuando entras y cruzas la reja de la entrada?" "No, no lo siento" "Ese es tu problema, todavía no te olvidai del otro lado, por eso algunos te conocen como Antumapu".