Venga

Hoy era un día de esos como para estar triste, pero veo que no lo fue. Tengo ahora solo una sana nostalgia. Por lo que hoy hago un llamado a vaciar sus cerebros junto a mi. Unámonos en la delicia de hablar y escribir tanta tontera como velocidad acepten nuestros dedos. Acompañadme y, por cierto, quedan advertidos de una vez por todas, que esta es mi casa y aquí, se hablan tonteras. Son libres de ir y venir, pero ya saben donde están. Que el cuerdo escriba con su cordura, está admitido sin prejuicios en mi nido.



He verificado que mis últimos post han sido de los más fomes y este no será la excepción.

Y he notado también que he intentado buscar una explicación sin quererlo. Al estado aquel, en el que generalmente me encuentro, en mi ignorancia le he echado la culpa a mi cerebro, el cual ha adquirido el adjetivo SECO. Siguiendo la misma línea, recordé las funciones cerebrales y busqué ahí el esclarecimiento a mis dudas. Don Casimiro argumentó una carencia tripera, entre las orejas, cosa que yo felizmente acepté. Incluso me llené de orgullo. Me agrada mucho saber que tengo un corazón que gobierna mis acciones. Pero a decir verdad, no me tranquilizaba para nada esta explicación. Y es entonces cuando a saltado a mi cerebro, mi no-cerebro, mejor dicho, la palabra KI. Así de la nada se metió y yo sin recordar una clara definición, sin saber que era lo que mi no-cerebro (el cual de ahora denominaré cerebro-seco) quería decir.

Ávida de conocimiento me metí al templo del saber de los saberes e invoqué al maestro: Google. Mi paso bajo sus santas instrucciones es lo que hoy compartiré con ustedes, de pura buena gente que soy; porque así lo mandan las enseñanzas.
Para que ustedes tomen el real peso de lo que hoy aprenderán, es que les detallaré mis intrépidas peripecias por el aquel tortuoso y difícil camino.

En la Barra de direcciones del navegador escribí algo, que solo se da a través de los sueños: http://www.google.cl/
En el buscador escribí “Ki”.
Seleccioné una búsqueda en español.
Apreté Intro.
El templo se abrió, debí leer.
Y luego vino lo más difícil, aprender el arte del copiar y pegar.

KI
“Para entender este concepto de origen chino-japonés es preciso conocer la idea que estos pueblos tienen del Universo y del hombre, cuyos lazos de intercomunicación e interacción constituyen una sutil energía a la que dan el nombre de ki (energía vital de las interacciones).Ki en japonés significa: corazón, éter, aliento, soplo, vapor, temperamento, etc., pero en general se refiere al fluido vital o energía que emana de la fuente universal para dar vida a todo lo existente.” (Ref. Notas Introductorias sobre KI)

“ "Ki" es el poder creador del universo, según la cultura japonesa. Todo es una expresión del Kl, o del Prana, del Chi, de la Shakti... para las diferentes tradiciones de India, China...” (Ref. ¿Qué es Reiki?)

Ahora viene lo bueno, un par de palabras para sacarlas en los momentos de absoluta enajenación, cuando estemos frente a los amigos, en un buen carrete y dejarlos anonadados ante nuestra cultura.
Imagínense que la conversación se viene así:

- Ohhh.., loco, me siento mal, no sé como, ando medio(a) desconcentrado(a)
Y aquí saltan ustedes con la frasecita pal bronce.
- Ki ga nukeru (decirlo con un dejo de sabiduría, el ojo derecho medio cerrado y la ceja izquierda levantada)
- Que &%$#”! te fumaste, dame de la misma.
- No pasa nah. Lo que a ti te pasa es que estás perdiendo tu Ki, así de simple. Estás bajo la influencia de emociones negativas, te caché al tiro, porque teni un humor bien como las huevas.

Entonces aquí viene la parte en que pica otro y les compra de una.

- ahhh, y yo!!. Ando entero relajado.
- Mmmm, entonces tu estás en un estado de Ki wo totoneru, tienes una buena recepción e irradiación de tu Ki... buena onda, loco.

Resumen: Tal vez he perdido mi Ki y usted no está solo.

Hagame la bondad de ser feliz.

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Super recuerdo pos-publicación: ¿Qué opinan acerca del tesoro Inca que se encontró en el archipielago Juan Fernández?... Yo opino que me deberían hacer entrega del 50% de las riquezas.
Se agradece la atención de mis auspiciadores. Que, dicho sea de paso, los pueden leer en sus blog. Dirija la vista al lado izquiero de la pantalla y encontrará sus nidos.